En nuestras estadísticas de Market Monday, Prosperity Investment Management examina las últimas novedades en los principales mercados financieros del mundo y le proporciona toda la información más reciente que necesita saber.
El Banco de Inglaterra ha elevado su tasa de interés básica al 1%, la más alta desde 2009, en un esfuerzo renovado por detener la creciente crisis del costo de la vida.
En un contexto de economía cada vez más volátil, el Banco de Inglaterra aprobó la subida como medio de combatir el aumento de la inflación, que ya se encuentra en su punto más alto en 30 años y se prevé que supere el 10% en 2022.
A pesar de aumentar la cifra, el Banco de Inglaterra también ha emitido una dura advertencia sobre una posible recesión en el futuro.
En los Estados Unidos, se han impuesto nuevas sanciones a Rusia, dirigidas a los servicios, los medios de comunicación rusos y el sector de la defensa. Entre ellas figuran la prohibición de vender servicios estadounidenses a Rusia, como la contabilidad, el cese de la publicidad estadounidense en tres cadenas de televisión controladas por el Estado, la prohibición de exportar tecnología, incluidos motores industriales y topadoras, y la imposición de más restricciones de visado a otras 2.600 personas rusas y bielorrusas, incluidos oficiales militares y ejecutivos de Sberbank y Gazprombank.
Los pedidos manufactureros alemanes cayeron un 4,7% más de lo esperado en marzo, impulsados por la disminución de los pedidos extranjeros, especialmente de fuera de la eurozona. La producción industrial cayó un 3,9%, la mayor caída desde el inicio de la pandemia. La oficina de estadísticas atribuyó la disminución a las interrupciones de la cadena de suministro debido a las restricciones provocadas por la pandemia y a la invasión de Ucrania por Rusia. Mientras tanto, los volúmenes de ventas minoristas de la UE cayeron un 0,4%, y las ventas por correo e Internet registraron las mayores caídas.
Los mercados chinos cayeron porque Beijing no mostró señales de relajar su enfoque de tolerancia cero con respecto al coronavirus, lo que generó preocupación por el coste económico de los bloqueos generalizados. El índice compuesto de Shanghai cayó un 1,5% y el índice CSI 300, de primera línea, que sigue a las mayores empresas que cotizan en bolsa en Shanghái y Shenzhen, se hundió un 2,7%.